- Tesla cierra otro trimestre con menos beneficios y vuelve a prometer un coche eléctrico barato, el posible Model 2, sin fecha concreta.
- El contexto fiscal, la caída de ayudas y la competencia china complican el futuro inmediato de la marca Tesla.
- Tesla revienta las rebajas de verano con descuentos de casi 5.000 euros para el Model 3.
¿Qué está pasando con Tesla? El último informe trimestral de la marca de Elon Musk ha vuelto a generar mucho ruido, y no precisamente del bueno. La compañía estadounidense, emblema de los coches eléctricos y dirigida por Elon Musk, ha cerrado el segundo trimestre del año con una nueva caída en sus cifras: tanto las ganancias como la facturación han retrocedido, lo que ha despertado ciertas inquietudes en los mercados.
El resultado económico no es un hecho aislado. Se encadena con la tendencia bajista del trimestre anterior, y tiene lugar a pesar de un repunte en la producción. En paralelo, se agrava el contexto: presiones fiscales, menos ayudas al consumidor y una competencia asiática que no da tregua.
Una caída en los números que enciende las alarmas
Tesla reportó un descenso del 16 % en sus beneficios netos, que quedaron en 1.172 millones de dólares. Las ventas de vehículos también retrocedieron en ese mismo porcentaje, arrastrando la facturación total un 12 %, hasta los 22.496 millones. La producción subió, pero no fue suficiente para compensar el bajón.
El margen bruto en el área automotriz se mantuvo un poco por encima de lo previsto (14,96 %), pero no alcanzó para animar a los inversores. El beneficio por acción quedó en 40 centavos, por debajo de los 43 esperados. Otro factor clave fue la reducción drástica, del 51 %, en los ingresos por créditos de emisiones, un recurso habitual para sumar ingresos sin fabricar vehículos. El ajuste fiscal y la menor entrada por ese concepto afectaron directamente al balance.
Además, el EBITDA ajustado (acrónimo de los términos en inglés Earnings Before Interest Taxes Depreciation and Amortization, que indica el beneficio de una empresa antes de restar los intereses a pagar por la deuda contraída) descendió un 7 %, y los gastos operativos apenas se movieron (sólo bajaron un 1 %), lo que suma presión sobre la eficiencia operativa del grupo.
Trump complica la vida a Tesla
El director financiero de Tesla, Vaibhav Taneja, explicó que los aranceles promovidos por la administración Trump han representado un coste de 300 millones de dólares sólo en el trimestre. La mayor parte de esa carga se concentra en la división automovilística. Y lo peor, según dijo, aún está por venir.
A esto se suma una decisión legislativa que afecta directamente al mercado de los eléctricos: la retirada de la deducción fiscal de 7.500 dólares para quienes compren coches eléctricos en Estados Unidos. A partir de agosto, podría empezar a notarse una caída en las entregas debido a esta medida.
Las noticias no fueron bien recibidas en bolsa: tras el anuncio de resultados, las acciones de Tesla bajaron un 2,6 % en los intercambios posteriores al cierre del mercado.
A vueltas con el coche barato: ¿qué pasa con el Tesla Model 2?
Cuando las cifras no acompañan, Tesla recurre a una de sus promesas más persistentes: el coche eléctrico “accesible para todos”. Según la empresa, ya se han fabricado las primeras unidades de ese modelo, que podría llamarse Model 2, aunque no han ofrecido detalles sobre su precio, denominación o fecha de comercialización.
La intención es comenzar la producción a gran escala en la segunda mitad de 2025. Sin embargo, el propio Taneja aclaró que los plazos podrían alargarse más de lo inicialmente previsto, alimentando dudas sobre si realmente llegará a tiempo y a precio competitivo. Según indica la agencia Reuters, podría tratarse de una variante más simple del Model Y, que ya ha acumulado varios retrasos en su desarrollo. La apuesta tiene sus riesgos: un modelo demasiado económico podría acabar canibalizando la gama actual.
De forma paralela, la competencia asiática, especialmente china, sigue ganando terreno con modelos más baratos y tecnologías similares. Y en ese escenario, Tesla parece haber perdido parte del gran éxito que durante años le dio ventaja.
Promesas de futuro y problemas internos en Tesla
Tesla continúa promoviendo sus proyectos a largo plazo. Uno de los más ambiciosos es el Cybercab, su servicio de transporte sin conductor, que ya se está testando en Austin con unidades del Model Y operando en modo autónomo. También sigue en desarrollo el camión eléctrico Semi, cuya producción está programada para 2026.
Elon Musk asegura que el Tesla Model Y autónomo llegará en un mes: ¿será verdad esta vez?
La compañía asegura que está en una etapa esencial por sus avances en IA, robótica y servicios. Pero, en el plano interno, el clima no es del todo estable. Varios altos cargos han abandonado la empresa recientemente, incluyendo un responsable clave en los mercados de Europa y Norteamérica.
Mientras Elon Musk se mantiene muy activo en el terreno político, incluso con declaraciones polémicas y posicionamientos cercanos a sectores radicales, Tesla debe afrontar diversas cuestiones sobre su liderazgo y visión estratégica. Sin un modelo estrella en el horizonte cercano, el reto para lo que queda de 2025 será mayúsculo.
Soy una periodista madrileña con más de 25 años de experiencia. Cursé los estudios de periodismo en el Centro de Estudios Universitarios San Pablo CEU. A lo largo de mi trayectoria profesional he trabajado en medios como Motor 16, Km77, Car & Driver o Quad & Jet, y he colaborado con departamentos de prensa como el de BMW.